En palabras del famoso escritor británico Sir Arthur Conan Doyle, creador de Sherlock Holmes: “Es un error capital teorizar antes de tener datos. Insensiblemente uno empieza a tergiversar los hechos para adaptarlos a las teorías, en vez de adaptar las teorías a los hechos”. Ahora, ¿cómo se relaciona esto con el sector de la seguridad y, de manera más específica, con la seguridad de nuestros equipos? En este artículo se analizan las 3 formas principales de utilizar los datos de detección de gases para mejorar la seguridad.
Si bien otros sectores se adaptaron hace años a la nueva realidad de una sociedad regida por los datos, el sector de la seguridad se ha quedado rezagado. Ahora es el momento de que el sector de la seguridad adopte los datos.
Muchos de nosotros utilizamos dispositivos conectados como teléfonos móviles y electrodomésticos inteligentes, pero cuando se trata de conectividad y recopilación de datos en el trabajo, el sector de la seguridad es más reservado. A menudo, las conversaciones sobre seguridad conectada, o el uso de dispositivos conectados para recopilar datos de seguridad valiosos y proteger a los trabajadores, harán que los responsables de seguridad citen cuestiones relacionadas con la privacidad.
Si bien es siempre importante encontrar un equilibrio entre respetar la privacidad de los trabajadores y mantener la seguridad, estas preocupaciones muestran lo fácil que es pasar por alto el valor de los datos de los detectores de gas portátiles o de zona. Hay muchas formas de utilizar los datos de los detectores de gas que no requieren vigilar cada movimiento de sus trabajadores.
La mejor forma de mejorar la seguridad es utilizar datos específicos de los peligros de su lugar de trabajo. Muy a menudo, los datos de detección de gases se recopilan, se almacenan y nunca se revisan. O peor aún, no se revisan hasta que un suceso catastrófico obliga a una investigación post mortem de las cifras.
En este artículo exponemos tres formas de utilizar los datos de detección de gases para mejorar la seguridad de los trabajadores.
Los detectores de gas pueden mostrarle datos valiosos sobre a qué gases están expuestos los trabajadores. Los eventos de alarma y los niveles de exposición elevados son pruebas claras de que su equipo podría estar en peligro. No obstante, las exposiciones prolongadas a gases justo por debajo de los umbrales de alarma señalan condiciones de riesgo con la misma claridad.
He aquí un ejemplo de cómo puede utilizar los datos de las alarmas de gas para hacer un seguimiento de la exposición de los trabajadores y asegurarse de que estos reciben atención médica cuando la necesiten:
Cuando suena una alarma alta de gas, los trabajadores evacuan la zona. Como responsable de seguridad, usted es el encargado del procedimiento de seguimiento. ¿Envía a los trabajadores expuestos a un reconocimiento médico? ¿O da por hecho que están perfectamente sanos porque dicen sentirse bien? En un caso como este, los datos recogidos por los detectores personales de gas podrían salvar la vida de una persona. Incluso las exposiciones breves a altas concentraciones de ciertos gases podrían ser perjudiciales para sus trabajadores. Tras una breve exposición, un trabajador podría sentirse bien, pero los síntomas podrían aparecer después de irse a casa a pasar el día. Con los datos recopilados por los detectores de gas, puede ver un informe detallado sobre la exposición a gases de cada trabajador, tanto si se ha disparado una alarma alta como si no, para tomar decisiones informadas sobre el seguimiento adecuado.
A pesar de todos los avances en la tecnología de detección de gases, siguen muriendo trabajadores por exposición a gases tóxicos y explosivos. Incluso con los instrumentos más fiables, la probabilidad de que los trabajadores resulten heridos o mueran en el trabajo sigue siendo alta si los instrumentos no se utilizan correctamente.
En una organización con una cultura de seguridad débil o procesos deficientes, los miembros del equipo podrían no utilizar los detectores de gas correctamente. O peor aún, puede que no los utilicen en absoluto. Puede utilizar los datos de sus detectores de gas para detectar los hábitos que ponen en peligro a los miembros de su equipo. Algunos programas de gestión de detección de gases vienen con herramientas que le ayudarán a utilizar los datos para identificar comportamientos de riesgo, como que los trabajadores utilicen detectores de gas sin pasar una prueba funcional o cuya calibración haya vencido, que ignoren los eventos de alarma o que no utilicen los detectores de gas en absoluto.
Etiquetar los datos de alarmas con ubicaciones específicas de su establecimiento le permite obtener nuevas perspectivas de datos que antes no se analizaban. Por ejemplo, podría observar el número de alarmas activadas en un lugar específico durante un periodo de tiempo determinado. Luego puede utilizar los datos de alarmas para detectar tendencias e identificar la causa raíz a fin de evitar que el problema vuelva a producirse.
A medida que se recaban más datos, aumentan las formas innovadoras de utilizarlos. Por ejemplo, hoy en día existen sistemas que utilizan modelos predictivos avanzados para identificar la trayectoria de dispersión de un escape químico. Con los modelos predictivos, los datos se introducen en un software que analiza patrones a fin de identificar lo que ocurrirá en el futuro, lo que le permite tomar medidas con rapidez y adelantarse a los peligros de los gases. Este tipo de datos es especialmente valioso cuando se utiliza de forma proactiva para realizar cambios antes de que se produzca una catástrofe.
Gracias al poder de los datos, en breve todas las empresas podrán predecir cuándo y dónde se producirá la próxima fuga de gas, de modo que puedan tomar medidas para evitarla. Pero hasta entonces, hay muchas opciones para utilizar sus datos de detección de gas para proteger a los trabajadores, evaluar su cultura de seguridad e impulsar mejoras operativas.
Como Sir Arthur Conan Doyle dice, es importante que utilice los hechos para fundamentar sus teorías, sobre todo cuando se trata de seguridad.
En una época en la que los datos reinan, el sector de la seguridad debe abandonar su postura tradicional y adoptar plenamente las inestimables perspectivas que ofrecen los datos. Como Sir Arthur Conan Doyle astutamente señaló, los hechos deben sustentar nuestras teorías; en este contexto, aprovechar los datos de detección de gases puede suponer la diferencia entre un entorno seguro y una catástrofe potencial.
Mediante el seguimiento de la exposición, la garantía de un uso adecuado de los equipos y la identificación de tendencias alarmantes, los responsables de seguridad pueden aprovechar el poder de los datos para proteger a sus equipos y hacer frente a las amenazas de forma preventiva. A medida que la tecnología avanza y los modelos predictivos se hacen aún más sofisticados, la promesa de un futuro en el que las fugas de gas se puedan predecir y prevenir se hace tangible. Hasta entonces, es crucial que el sector de la seguridad defienda los datos, respetando su papel fundamental para garantizar la seguridad de los trabajadores y la excelencia operativa.