Un gas combustible es una sustancia que puede inflamarse en presencia de una fuente de ignición, ya sea en aire u oxígeno. El hidrógeno, el metano, el propano y el isobutano son algunos de los ejemplos más comunes de gases combustibles. Estos gases pueden provocar accidentes catastróficos por explosión de gas al mezclarse con una cierta cantidad de oxígeno.
Para evitar explosiones de gas catastróficas, es importante conocer el Límite Inferior de Explosividad (LEL) y el Límite Superior de Explosividad (UEL) de los gases combustibles. LEL es la concentración más baja de gas mezclado con aire que puede inflamarse, mientras que UEL es la concentración más alta. Se debe utilizar un detector de gases combustibles fiable en las zonas donde haya gas para activar una alarma antes de que se supere el LEL y activar medidas de seguridad como cortar el suministro de gas y añadir ventilación.
En el mundo de los líquidos inflamables y combustibles, la Asociación Nacional de Protección contra Incendios es la máxima autoridad. Según su Código de Líquidos Inflamables y Combustibles, los líquidos con un punto de inflamación inferior a 37,8 °C (100 °F) se clasifican como inflamables, mientras que aquellos con un punto de inflamación superior a 37,8 °C se consideran combustibles. Cabe destacar que la OSHA ha evolucionado hacia el Sistema Globalmente Armonizado (SGA) de clasificación y eliminó el término “combustible” de su norma 29 CFR 1910.106 en 2015. Como resultado, todos los líquidos con un punto de inflamación inferior a 93 °C (199,4 °F) se clasifican ahora como inflamables.
Combustión es el proceso por el cual una sustancia reacciona con el oxígeno del aire y libera energía en forma de calor y luz. Cuando cualquier vapor de líquido o gas supera el punto de inflamación, que es la temperatura mínima necesaria para que se enciendan en el aire, se convierte en combustibles y puede provocar una explosión. Para garantizar la seguridad, es esencial disponer de un preciso sistema de detección que pueda controlar los niveles de gases combustibles en el aire. Dado que estos gases tienen diferentes densidades, siendo algunos más pesados y otros más ligeros que el aire, es importante que coloque los detectores de gases combustibles de manera apropiada en sus instalaciones.
Descargue la tabla Límites Inferiores de Explosividad (LEL) de Gases Combustibles para conocer el LEL del amoniaco, del hidrógeno, del metano y de otros.
Los siguientes son los límites inferiores de explosividad (LEL) de los gases seleccionados |
|||
Acetona |
2,5% vol |
Hexano |
1,1% vol |
Acetileno |
2,5% vol |
4,0% vol |
|
15,0% vol |
Alcohol isopropílico (isopropanol) |
2,0% vol |
|
Benceno |
1,2% vol |
5,0% vol |
|
Butano |
1,9% vol |
Alcohol metílico (metanol) |
6,0% vol |
Alcohol butílico (butanol) |
1,4% vol |
Metil etil cetona |
1,4% vol |
12,5% vol |
n-pentano |
1,4% vol |
|
Éter dietílico |
1,9% vol |
Propano |
2,1% vol |
Etano |
3,0% vol |
Propileno |
2,0% vol |
Alcohol etílico (etanol) - |
3,3% vol |
Estireno |
0,9% vol |
Etileno |
2,7% vol |
Tolueno |
1,1% vol |
Óxido de etileno |
2,7% vol |
Exileno |
1,1% vol |
Descargue la tabla Límites Inferiores de Explosividad (LEL) de Gases Combustibles para conocer el LEL del amoniaco, del hidrógeno, del metano y de otros.
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